El confort comienza estando atento a la conexión mente-cuerpo. Preste atención al hecho de que todo lo de usted está conectado: sus sistemas sociales, emocionales, cognitivos y físicos, y cada uno de ellos se impacta entre sí y cómo usted se mueve por el mundo.
- ¡Conviértase en un detective del estrés!
- Reconozca las señales y las fuentes de estrés y cómo afecta su estado físico y emocional, así como también su comportamiento.
- Reduzca el estrés tomando conciencia de cómo se siente cuando recién comienza a sentirse estresado, así como también de cómo se siente al estar tranquilo.
- Reformule los factores estresantes para que pueda desarrollar estrategias personalizadas para el cuidado personal. Tómese tiempo para si mismo y desarrolle rutinas para el cuidado personal. Usted está modelando positivamente para su hijo cómo modular las emociones cuando usted utiliza estrategias para calmarse y buscar el equilibrio.
- Desestresarse y mantenerse activo. Coma, juegue, muévase y duerma. Camine, medite, baile, cante, haga yoga, ¡haga aquello que disfrutas! Tómese el tiempo, aun si es solo una caminata rápida alrededor de la cuadra.
- Se toma tiempo encontrar el confort. Sea paciente con si mismo(a) mientras practicas. Una vez que se sienta cómodo(a), puede ser una poderosa fuente de confort para su hijo.