Susana lleva a su hijo Jaime, de doce meses, al parque para jugar en la arena. Susana recibe una llamada telefónica que la distrae de jugar con Jaime. Después de un tiempo, Jaime se siente ignorado, se pone quisquilloso y empieza a llorar. Susana cuelga el teléfono rápidamente pero le cuesta tranquilizar a Jaime. ¿Cómo puede Susana mejorar las cosas?
• Pedir disculpas y conectarse de nuevo. Es un primer paso bastante obvio, pero a veces lo ignoramos. Susana podría decir, “¡Lo siento! Venimos para jugar juntos y yo hable demasiado tiempo por teléfono”. Con el tiempo puede usar una frase sencilla como “Equivocarse, disculparse” para comunicar su deseo de reconectarse de nuevo con su hijo.
• Tomar acción y hacer reparaciones. Después de pedir disculpas y darse cuenta de la respuesta de su hijo, dele su completa atención. Susana podría centrar su atención en su hijo al decir, “¡Juguemos juntos en la arena! ¿Qué quieres construir hoy? ¡Vamos a divertirnos!”
• Recordar y repetir. El poder “Reparar” después de “Equivocarse” quiere decir que usted tiene una señal específica para recordarle que no cometa el mismo error. Ayúdese a acordarse a actuar de otra manera al crear una rutina para su nuevo comportamiento. Por ejemplo, el parque siempre ha sido un lugar a dónde Susana lleva a Jaime para que se puedan divertir juntos. Para recordarle a Susana que mantenga su conexión con Jaime, ella hace un plan de apagar su teléfono tan pronto como lleguen al parque. De esa manera, ella puede estar presente y no sentirse distraída.
Al demostrar que es posible componer los errores y que los pueden reparar en una manera sin tener vergüenza, el Equivocarse, Disculparse hace que sea más probable que su hijo confiese sus propios errores.
El Equivocarse, Disculparse puede convertirse en un “ritual de reparación” para su familia. family.
• La rima, “Equivocarse, Disculparse” puede inspirarles a usted y a su hijo a darles una manera especial de confesar sus errores y un proceso para aprender a Disculparse y Reparar el error.
• Al crecer su hijo, puede ahorrar tiempo y conservar su dignidad al preguntarle, “¿Es este un momento de Equivocarse, Disculparse?” ¡Y él se lo puede preguntar a usted también!
El objetivo para usted y su hijo es aprender a componer sus propios errores y entender la importancia de las reparaciones. Tome el tiempo para cuidarse y hacer reparaciones. Fortalecerá su conexión y aumentará la confianza que tiene con su hijo.