Cuando usa el diálogo interno para enseñarle a su hijo a darle nombre a sus sentimientos, le ayuda a conectar sus sentimientos con palabras. Esto le ayuda a entender y expresar mejor sus emociones y experiencias. Usted puede jugar un juego con su hijo de corresponder imágenes de varios sentimientos de expresiones faciales con los sentimientos (feliz, triste, enojado, etc.).